La región del Tigris y el Éufrates aparece mencionada en la biblia como una zona de fértiles tierras aluviales óptimas para el desarrollo de la agricultura y el asentamiento de tribus. a principios del milenio IV a.C. se establecieron en esta zona los sumerios, cuyo milenario proceso de desarrollo social y cultural culminó con la invención de la escritura, la adquisición de notables conocimientos matemáticos y astronómicos y la primera gran experiencia urbana con la creación de las ciudades-estado.
La aparición de las ciudades-estado sumerias, con una organización urbana y social de cierta complejidad, hizo necesaria la construcción de importantes obras colectivas para acoger a una creciente comunidad urbana. La escasez de piedra impidió la existencia de una arquitectura monumental arquitrabada como en Egipto, pero la utilización del adobe dio a la arquitectura sumeria algunos de sus rasgos mas personales:
- La creación del arco
- La bóveda
- El revestimiento con cerámica vidriada del muro
Al período de Uruk se remonta la construcción de los primeros templos, los edificios más representativos de la arquitectura sumeria. De planta rectangular, constaban de una amplia nave central y dos laterales, divididas en capillas. Desde el exterior se destacaba el aspecto macizo de la construcción, con el recinto alzado sobre una plataforma y varios patios en torno a los que se distribuían las distintas dependencias.
La arquitectura de las primeras dinastías (2.900 – 2.330 a.C.), en las ciudades de Uruk, Lagash o Ur, rompió con la disposición abierta de estos primeros templos para convertirlos en edificios fortificados, como es el caso del erigido en Khafadye, rodeado por un doble recinto amurallado. A este período corresponde también la construcción de las grandes murallas de las ciudades y la aparición de los primeros palacios, reflejo del poder creciente de las ciudades y de sus soberanos y también de la progresiva militarización de la sociedad sumeria. Cabe destacar en este sentido la imponente muralla de Uruk, con centenares de torres, y, entre los palacios, el de Mesilim, una soberbia construcción de entrada monumental, organizado en dos grandes núcleos, uno destinado a la corte y el otro a las funciones administrativas.
Los artistas sumerios cultivaron poco la escultura de bulto redondo, dedicando la mayor parte de sus esfuerzos al relieve, en el que realizaron auténticas obras maestras:
- El vaso de Uruk
- El relieve de Uruk
Por lo que representa a la estatuaria, pese a las posturas hieráticas, muestra una clara tendencia al naturalismo:
- Las figuras aparecen por lo general sentadas, con las manos juntas y dotadas de unos grandes ojos expresivos, como El intendente Ebih-il de Mari o la Dama de Warka (3.000 a.C.).
En el período de las primeras dinastías se enmarcan obras de refinada factura como la Placa de Ur-Nanshe de Lagash y la Estela de los buitres.
De una gran riqueza son los objetos suntuarios depositados en las tumbas reales de Ur, Joyas, arpas decoradas con figuras, nácar, piedras semipreciosas, y piezas extraordinarias representativas del arte musivario como el Estandarte de Ur. Célebres son, asimismo, los sellos cilíndricos, característicos del llamado «estilo de brocado», que presentan variados motivos decorativos en los que se despliega toda la creatividad sumeria, desde sencillos motivos geométricos a escenas religiosas y animales entrelazados en lucha.
El Pueblo de Sumer
Una de las piezas fundamentales para conocer la vida, costumbres y la manera de vestir de la antigua Sumeria es el conocido Estandarte de Ur. un bellísimo objeto de madera delicadamente trabajado, con incrustaciones de nácar y lapislázuli, hallado en una tumba de esta ciudad. El célebre estandarte está compuesto por dos paneles principales y dos laterales, en los que aparece toda una galería de personajes tomados de los distintos estratos de la sociedad sumeria, desde soldados y prisioneros en las escenas bélicas, al pueblo obsequiando al rey con el botín de guerra y el banquete.
NAUČITI PLUS 